Aunque ya han pasado unos meses, seguro que aún sigue rondando la ropa del verano por tu casa, esa que hace tiempo que no empleas. Si algo está claro es que cada cambio de estación es un lío para la ropa de la casa. Así que, si aún no lo has hecho, te damos una serie de consejos para que empieces a organizar toda la ropa que no te pones.
Cómo tener el armario perfecto:
Selecciona por temporadas
Debes cambiar de sitio muchas cosas pero, antes de nada, presta atención a las prendas de verano que puedes seguir empleando con el frío, tales como los vaqueros o las chaquetas ligeras.
Lo que no usas
Ya que has empezado a organizar, no acumules aquellas prendas que ya no te pones. Si llevas más de dos años sin usar esa camiseta o esa falda de la que nunca te desprendes, dónala o regálala. Ganarás espacio.
Los zapatos importan
No permitas que los zapatos se te amontonen en el fondo del armario o debajo de la cama. Usa zapateros para organizar el espacio o apílalos en sus cajas originales o en unas especiales.
Los complementos
Evita que los cinturones estén enrollados y procura colgarlos. Las medias o prendas delicadas conviene no mezclaras con la ropa interior, pues se pueden enganchar. Lo ideal es usar una cesta.
Repasa la perchas
Para que visualmente todo esté en orden y además, mejore la eficiencia de tu armario, evita las perchas rotas que puedan estropear tus prendas. Lo mejor sería usar perchas iguales y no poner en ellas más de dos piezas juntas.
Decorar y organizar
En invierno, usar pañuelos y bufandas forma parte de la vestimenta habitual. Prueba a colgarlos con un cordón en la pared y, con pinzas de ropa, engancha tus pañuelos. Decorarás a la vez que organizas.
Un perchero extra
La ropa de invierno ocupa más espacio que la de verano por lo que puede que necesites más espacio. Construye un perchero en el que poder organizar tus abrigos fuera del armario.
Todo en departamentos
Usa separadores en la mesita de noche para organizar tu ropa interior o calcetines. En el armario, dispón cajas grandes para los pañuelos. Encima de la cómoda, usa pequeños recipientes para las joyas.
Bolsas al vacío
Una vez que tengas todo organizado, usa estas bolsas para almacenar la ropa que no usarás esta temporada. Son muy prácticas y recuden su volumen a la mitad una vez aspirado el aire de su interior.
Bonus: 10 tips para ordenar y organizar la ropa de tu armario
No hay nada mejor que poder encontrar nuestras prendas de vestir rápido cuando tenemos prisa. Sin embargo, debido a las múltiples ocupaciones diarias, a veces nos encontramos con un desorden en el armario que nos dificulta esta tarea. Por lo tanto, es imprescindible aprender a ordenar y organizar la ropa. Lo más frustrante es que a veces dedicamos cierto tiempo a su organización y, más tarde, vemos que esos esfuerzos son en vano porque todo se vuelve a desarreglar. El problema es que pasamos por alto los trucos para optimizar espacio y acabamos saturando los cajones. ¿Cómo podemos ordenar y organizar la ropa sin complicarnos? Pues bien, aunque creas que no tiene ciencia, hay trucos que lo hacen más simple. En esta ocasión te queremos compartir en detalle los 10 mejores para que los tengas en cuenta a partir de ahora.
1.- Usar recipientes circulares
Algunos recipientes circulares, ya sean de lata o de plástico, pueden ser útiles para separar esos pequeños accesorios que hacen ver el armario desordenado. Tan solo basta con introducirlos en los cajones y, luego, meter en ellos las bufandas, pañuelos o cinturones.
2.- Enrollar las camisetas
Eso de doblar las camisetas o ponerlas en ganchos no siempre es la mejor opción para que todo luzca ordenado. Una forma simple de acomodarlas es hacer pequeños rollos y separarlos, por ejemplo, de acuerdo al color.
3.- Acomodar en forma vertical
La opción anterior a veces no llama la atención para ordenar y organizar la ropa en el armario. Por lo tanto, es conveniente conocer otra manera de colocar las camisetas. Una forma muy simple, que además optimiza el espacio, es ponerlas en forma vertical dentro del cajón.
4.- Poner las bufandas en ganchos
Los ganchos de ropa son un elemento perfecto para ganar más espacio al organizar el armario. En este caso proponemos usarlos para colgar las bufandas, pañuelos y demás accesorios largos, ya que los hace lucir ordenados e impide que se enreden.
5.- Usar ganchos con hilo de color
La personalización de los ganchos para la ropa es un truco muy útil cuando queremos encontrar todo en su lugar. Al cubrirlos con hilos de colores o cintas, estos permiten clasificar las prendas de vestir, por ejemplo, según su color.
6.- Poner una varilla extensible
En el mercado hay disponibles algunas varillas extensibles que se adaptan con mucha facilidad en el interior del armario. Así, al aprovechar esos espacios libres, es posible darle un mejor orden a la ropa y accesorios.
7.- Colgar los jeans en ganchos de cortina
Los ganchos para la cortina del baño se pueden reutilizar como accesorio para ordenar y organizar la ropa en el armario. Aunque pareciera que solo tienen un fin, este pequeño elemento puede ser útil para colgar los pantalones de jeans.
8.- Usar la anilla de una tapa de refresco
En un principio esta idea suena un poco rara. Sin embargo, es bastante útil para optimizar el espacio cuando los cajones se empiezan a saturar. Consiste en poner la anilla de una tapa de refresco en un gancho y, enseguida, insertar otro gancho más.
9.- Colgar las botas
Las botas son un tipo de calzado muy especial. No obstante, suelen ocupar mucho espacio cuando se almacenan dentro del armario. Para ordenarlas sin maltratar sus materiales, basta con comprar unos ganchos finos que permitan colgarlas.
10.- Poner la ropa interior en cajas
Las cajas de cartón pequeñas, o incluso las cajas de madera, pueden ser útiles para clasificar la ropa interior sin dificultad. Al introducir estos complementos en los cajones del armario podemos hacer varios compartimientos para las respectivas prendas. Debes asegurarte de que se ajusten bien dentro del mueble, para que lo puedas cerrar sin dificultades. Si lo prefieres, los puedes usar para almacenar camisetas, bufandas o cualquier otro accesorio pequeño.