Nunca hay suficiente tiempo para la rutina de belleza, especialmente en la mañana. Entonces, cuando te quedas sin un determinado producto de belleza y tu precioso tiempo se acaba, parece un completo desastre. No te preocupes, acepta el desafío de reemplazar, con lo que tienes a mano, los productos de belleza que hacen falta, y solucionarás tus problemas de inmediato.
Polvo para bebé + cepillo para el pelo = champú seco
Primero, crea un polvo de bebé casero. Utiliza almidón de maíz solo o combínalo con ingredientes como polvo de arrurruz, bicarbonato de sodio o arcilla blanca. Siempre que tengas una extrema necesidad de lavarte el cabello rápidamente, solo cepíllalo con esta mezcla.
Almohadilla de algodón + cepillo de rímel = pestañas densas
Toma una almohadilla de algodón normal y rásgala para hacer 2 piezas. Cubre tus pestañas con una capa de rímel. Toma un cepillo de rímel, envuélvelo con las almohadillas en el interior y aplícalo en las pestañas de manera uniforme. Pon otra capa para cubrir completamente y ocultar el algodón.
Mayonesa = mascarilla para el cabello
Para lidiar con el cabello seco y rígido, utiliza mayonesa y distribúyela por todo el cabello. Deja reposar durante aproximadamente media hora. Lava con tu champú. ¡Ahí tienes! Disfruta de sus efectos sedosos e hidratantes.
Piel húmeda + perfume = olor duradero
Además de aplicar perfume en áreas específicas del cuerpo, es crucial usarlo inmediatamente después de una ducha, mientras la piel aún está húmeda. Prolongará notablemente el efecto de la fragancia.
Productos para el rostro + cuidado de la piel húmeda = mejor absorción
Lávate la cara y aplica inmediatamente productos para el cuidado de la piel, sin necesidad de limpiarla. De esta manera, los poros estarán más abiertos en comparación a cuando la piel no está húmeda.
Wasabi + labios = efecto regordete
Distribuye el wasabi en tus labios y déjalo allí durante 10 minutos para que se vean más rellenos. Aumenta el tiempo en caso de no ver resultados, y redúcelo si te duele.
Cerveza = acondicionador para el cabello / champú
Intenta lavarte tu cabello con cerveza. Algunos experimentan un efecto brillante, mientras que otros afirman que la estructura del cabello se vuelve más saludable. No es recomendable usar de forma regular este truco en lugar del champú o el acondicionador para el cabello. Además, a las personas que experimentan pérdida de cabello no se les recomienda probar esto.
Alcohol + iluminador = sombra de ojos
Vierte alcohol en el recipiente, mézclalo con una cuchara, aplástalo y déjalo secar completamente. Las piezas rotas volverán a juntarse y obtendrás una nueva sombra de ojos. Lo mismo se puede hacer con bronceador y polvos faciales.
Acondicionador para el cabello + agua = acondicionador para el cabello sin enjuague
Combina tu acondicionador para el cabello con agua en una proporción de 1:1 y llena con esta mezcla una botella de spray. Ahora puedes aplicar el acondicionador sin lavarte el pelo de antemano. Salpícalo sobre tu cabello y siéntete fresco de inmediato.
Polvos caseros + contenedor de bronceador usado = bronceador nuevo
Toma 1 cucharada de canela, 1 cucharadita de cacao en polvo, nuez moscada y harina. Mézclalo todo. En caso de que no te guste el color, juega con las proporciones hasta que alcances el tono deseado. Felicidades: acabas de crear un bronceador aromático, saludable y ecológico.
Bonus: Guía de accesorios para cualquier tipo de ropa
¿Cómo elegir un accesorio para el cuello?
Ajustados al cuello.
Cuello ovalado
Formas suaves y redondas.
Sin tirantes
Cadenas delgadas.
Cuello alto
Cadenas o hilos largos.
Escote en V
Repite la forma del escote.
Escote asimétrico
Te recomendamos usar pendientes.
Escote cuadrado
Colgantes de forma cuadrada o rectangular.
Cuello drapeado
Anímate a usar un colgante debajo del cuello.
Elige pendientes según tu tipo de rostro. Empecemos por el rectangular
¡Mucho volumen!
Rostro alargado
Recuerda evitar las formas largas y planas.
Rostro triangular
Líneas curvas te ayudarán a suavizar tus rasgos.
Rostro ovalado
¡Usa lo que más te guste!
Rostro rombo
Cortos y anchos.
Rostro cuadrado
Pendientes más largos que anchos.
Rostro redondo
Evita el uso de anillos voluminosos.