Una encuesta descubrió que usar lentes hace que te veas un 75% más sexy para el sexo opuesto. ¿Quieres lucir unas nuevas gafas, pero te preocupa que si eliges la forma incorrecta te veas mal? Tal vez hayas leído guías demasiado complicadas sobre cómo saber cual es la forma de tu cara, pero aún así no estás seguro de cómo comprarlas. No te preocupes más, sigue leyendo para encontrar las respuestas a todas tus preguntas relacionadas con gafas.
¿Cómo medir?
Básicamente, existen seis tipos de rostros: rectangular, ovalado, en forma de corazón, cuadrado, redondo y en forma de diamante. Una mirada rápida al espejo no es suficiente para determinar la forma de tu cara. Para conocer bien esto, debes seguir la siguiente guia de medición: Cómo medir: usa un metro. Mientras realizas las medidas, mantén el metro de manera recta y no te desvíes por las diferentes formas de tu rostro.
Qué medir: el ancho de tu frente, el ancho de tus mejillas, el ancho de tu mandíbula y la longitud de tu cara. Mientras tomas estas medidas, asegúrate de medir los puntos más amplios o más lejanos.
Rectangular
Cómo identificarla: Tu cara es más larga que ancha. La frente, las mejillas y la mandíbula tienen casi el mismo ancho.
Qué debes usar: usa marcos grandes y anchos con líneas definidas.
Forma de corazón
Cómo identificarla: Tu mandíbula es puntiaguda, las mejillas son anchas y la frente también es muy ancha.
Qué debes usar: gafas que apunten hacia abajo y acentúen la línea de la mandíbula, como las que son tipo pilotos. También puedes usar gafas sin montura ya que logran que tu cara no parezca demasiado tosca.
Cuadrado
Cómo identificarla: la longitud de tu cara y la distancia entre las mejillas son casi iguales. La mandíbula, las mejillas y la frente tienen el mismo ancho.
Qué debes usar: marcos estrechos ovalados o rectangulares con bordes redondeados.
Ovalado
Cómo identificarlo: Tu rostro es más largo que ancho y la frente es sólo un poco más ancha que la mandíbula.
Qué debes usar: usa marcos que sean más gruesos en la parte superior que en la parte de abajo.
Redondo
Cómo identificarla: La cara es tan larga como ancha, con la frente y la mandíbula un poco más finas pero de proporciones relativamente iguales.
Qué debes usar: gafas cuadradas o rectangulares con esquinas agudas.
En forma de diamante
Cómo identificarla: Eres de pómulos anchos, barbilla puntiaguda, frente un poco más delgada.
Qué debes usar: usa marcos con bordes redondeados que no sean más anchos que las mejillas.
Ahora que sabes cómo elegir el tipo de gafas que se adapta mejor para tu rostro, ¡pruébalo para conseguir unas gafas nuevas tú mismo! Después de todo, usar lentes no solo te hace lucir con más estilo, sino que además protege tus ojos del polvo, la contaminación y los rayos UV. ¡Déjanos saber cómo te sientes con tus nuevos lentes en los comentarios a continuación!
Bonus: 11 Trucos infalibles para aquellos que usan lentes
Si llevas lentes, muchas veces tienes que enfrentar dificultades que las personas con buena vista desconocen. Buscar el estuche de los lentes es una verdadera aventura, y para que no se empañen en días fríos tienes que aplicar tus súper poderes.
Encontrar los lentes en la oscuridad
Aplica en tu estuche de lente una línea delgada de pintura fluorescente. Verás que te será más fácil encontrar tus lentes en un cuarto oscuro.
Limpiar los lentes
Para limpiar los lentes el material más adecuado es microfibra. No raspa la superficie de los lentes y no acumula suciedad. Bajo ninguna circunstancia frotes tus lentes con tu camiseta o una manga de tu camisa, así aparecen microrasguños que sobreesforzarán tu vista.
Sustituir los lentes
En casos extremos, cuando los lentes no están disponibles, tampoco son tan necesarios. Si tienes miopía, puedes usar tu smartphone para ver los detalles con mayor claridad.
Lavado de los lentes
¡Los detergentes para lavar platos son perfectos para lavar los lentes! No uses detergentes que contengan alcohol, vinagre, amoniaco o blanqueador. Estas sustancias destruyen el recubrimiento de los lentes.
Para que los lentes no se empañen
Uno de los problemas principales de todo aquel que usa lentes es que se empañen. Para que al pasar de un lugar frío a uno más cálido a tus lentes no les suceda esto, previamente limpia los vidrios con jabón líquido o de barra.
Los lentes no son una diadema
No uses los lentes como diadema para el cabello: su marco se deformará y se te estará cayendo. Cuando necesitas lavarte la cara o en otras ocasiones cuando no usas lentes, mejor quítatelos.
Reparar rápidamente los lentes
Si perdiste las tuercas de los lentes, usa un mondadientes como solución temporal. Junta el marco e inserta un mondadientes, luego romper la parte restante.
Las varillas demasiado anchas o angostas
Si tus lentes siempre se te caen, mantén los terminales (patas) de las varillas sobre el agua caliente durante algunos minutos hasta que el plástico se ablande un poco. Dobla los extremos hacia abajo ligeramente para que estén más pegados hacia las orejas. Si, al contrario, los lentes te quedan un poco angostos, mantén sus varillas sobre el agua caliente e intenta desdoblarlas ligeramente hacia arriba para reducir la presión.
Plaquetas nasales
Para ajustar las plaquetas nasales, pon tus lentes sobre una superficie lisa para verlos bien.
Forma del marco
Si tienes los ojos muy separados, elige marcos con punte nasal grueso o bien marcado. Esto atrae la atención al centro del rostro y los ojos parecen más juntos. Si tienes los ojos muy juntos, elige marcos con elementos decorativos en sus extremos. Esto da la impresión de una distancia más grande.
Para los conductores
No dejes las gafas con lentes de plástico en el tablero bajo la luz directa del sol. El calor puede deformarlos o incluso reventarlos. Mejor guarda tus lentes en un compartimiento especial.