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14 Cosas que nunca verás en una francesa


Las mujeres francesas se asocian con un gusto impecable, y un estilo y elegancia especial inherente solo a ellas. Una de las normas principales en su look es un sentido de proporción en todo: desde los zapatos hasta el maquillaje. Aquí hay algunas cosas para aprender.

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Smalljoys te propone ver qué cosas y normas tienes que rechazar para siempre si te gusta el estilo de Sophie Marceau y Marion Cotillard.

1. Medias y pantimedias de color piel

Solo una persona despistada no escribiría sobre las pantimedias, pero lo peor es ponértelas para un paseo en los Campos Elíseos. Las piernas deben estar desnudas o con pantalones o con pantimedias y medias de color negro u otro oscuro. En realidad, imitar la piel abierta en donde no la hay, para las francesas, es igual que no respetarse a sí misma.

2. Los sujetadores push-up

El personaje de Charlotte Gainsbourg en Nymphomaniac de Lars von Trier ha generado un completo auge de moda del pecho pequeño en Francia. Antes tampoco se avergonzaban de los pequeños tamaños, pero ahora, levantar o aumentar el pecho artificialmente es simplemente de mal gusto. Las mujeres francesas demuestran que la verdadera sexualidad no se encuentra en el tamaño del busto, sino en la energía que posee la dueña. Por eso, al elegir el conjunto de ropa interior para el look de una francesa, ella rechaza las compras de los brasiers ajustados o de push-up a favor de un encaje suave femenino.

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3. Exagerar los accesorios

En la moda francesa está en vigor una ley: entre más accesorios haya, más sencilla será la ropa. Ponerse una falda multicolor, zapatos y, encima de todo, un par de pulseras, collar y aretes es lo peor para las francesas. Por lo general, hay que hacer elección a favor de una cosa: la ropa llamativa, accesorios brillantes o cinturón/bolsa destacados.

4. Los logotipos llamativos de marcas famosas

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Las blogueras franceses escriben que una verdadera elegancia es cómo te mantienes y no los logotipos brillantes en todas las prendas de tu guardarropa. Por eso, utilizar zapatos y ropa, además, llevar contigo una bolsa con logotipos demasiado notables es una señal de mal gusto. Todavía es peor cuando están presentes en varios artículos al mismo tiempo.

5. Solo el estilo de ciudad en la ciudad

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Las francesas valientemente utilizan elementos del guardarropa de playa incluso estando en la misma ciudad. Si tienes un buen humor de verano y en la calle el clima es agradable, ¿por qué no ponerte un vestido y adornar tu look con alpargatas y un sombrero de ala ancha? A las francesas no les molesta utilizar este atuendo incluso al no encontrarse en la zona costera de Niza, sino en el centro de París.

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6. Un look bien elegido y perfecto

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Para las francesas, la exageración con el maquillaje y el peinado fijo es una señal de mal gusto. Salir de casa cada día como si fueras a una sesión fotográfica para una revista ilustrada no es de su estilo. Para las mujeres francesas es importante conservar un poco de descuidoun look un poco incompleto. El peinado normalmente crea la impresión que para hacerlo solo se necesitaron dos movimientos con el cepillo. Esto le da espontaneidad y libertad, por eso a los hombres les gusta tanto hablar con ellas. Ellas no repelen con su perfección calibrada hasta el más mínimo detalle y el rostro de una muñeca.

7. Un relieve visible de los músculos

Los estándares de oro de una caminata elegante por parte de Brigitte Bardot están vivos en Francia hasta hoy en día. Por lo tanto, a las francesas les gusta hacer hincapié en la cintura, piernas esbeltas y no crear músculos en el abdomen y glúteos para satisfacer el glamour mundial. Para ellas es importante permanecer en un estilo femenino y suave. La norma general es simplemente una figura elegante y esbelta.

8. Desprecio por los sacos

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En el guardarropa de cada francesa hay más de una decena de diferentes sacos, chaquetas y bléiser para toda ocasión. Ellas son unas verdaderas fanáticas de este elemento de guardarropa y pueden complementar cualquier look. En el lugar donde las mujeres sin pensar eligen una chamarra de piel o una cazadora deportiva, la francesa elegirá un bléiser elegante que destaque la cintura.

9. Tacones y plataformas muy altos

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Los estilistas franceses escriben que los zapatos extremadamente altos, como los de Lady Gaga, solo solo pueden verse en una pesadilla. Tales zapatos aumentan considerablemente la estatura y la elegancia del look, pero inevitablemente lo hacen más llamativo. Las francesas valoran más la feminidad clásica sin elementos bruscos. Al elegir zapatos, se dirigen con el siguiente pensamiento: ponerse tacones con los cuales se pueda caminar.

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10. El menosprecio al estilo de sus mamás y abuelas

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Para las francesas, las mujeres de las generaciones anteriores son verdaderos íconos del estilo. Ellas con todas sus fuerza tratan de ser como ellas en lugar de seguir la moda actual. Frecuentemente, entre las mujeres que caminan en la calle, es difícil distinguir cuál es la mamá y cuál la hija adulta, ya que las dos se ven tan elegantes.

11. Las prendas oversize sin acento en la cintura

Las prendas oversize son adecuadas cuando sales del mar o después de tomar un baño. En los demás casos, las francesas tratan de hacer hincapié en la cintura. Para ellas es importante sentirse elegantes y un poco frágiles, es bastante difícil obtener esta sensación al ponerse ropa oversize.

12. Rendirse debido a su edad

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Nada puede impedir a una francesa ser elegante y sofisticada, en especial su edad. Para las francesas es absolutamente imposible descuidarse después de los 40, 50 y más años; el estilo está en su sangre. Por eso, al caminar por las calles francesas y al visitar las cafeterías, puedes encontrar un montón de damas de cualquier edad vestidas con elegancia.

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13. Los abrigos de piel natural para las chicas jóvenes

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Vestirse con pieles naturales caras a los 20 años es igual que tener un logotipo de Chanel en la bolsa, zapatos y la hebilla del cinturón al mismo tiempo. Los abrigos de piel natural en Francia son un indicador de estatus y edad, una chica joven no lo necesita en absoluto.

14. Preocupación y ansiedad en el rostro

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“El signo más cierto de la sabiduría es la constante serenidad”, escribió el filósofo francés Michel de Montaigne. Él tenía razón. Las mujeres fruncidas, arrogantes y demasiado serias alejan a todos. Basta con acudir a una francesa y ella te responderá con una sonrisa, al mismo tiempo, no importa si no durmió bien y qué planes tenga en dicho momento.

¿Estás de acuerdo con las normas del estilo francés? ¿Qué prendas serían difíciles de rechazar para ti, y en general, qué es lo que no rechazarías?

Bono: 7 Razones de por qué las francesas no tienen problemas con la atención y su autoestima no tiene nada que ver

7. Ellas coquetean independientemente de si tienen pareja o no

Nuestra mentalidad está basada en el concepto de que, si la mujer tiene una pareja constante, entonces ya no puede coquetear con otros, de lo contrario se percibe como un engaño o casi una traición. La francesa se refiere al coqueteo con los ojos de otra manera, porque sabe que si deja de gustarle a los otros, entonces su hombre también, con el paso del tiempo, perderá el interés.

Pero no pienses que nosotros te exhortamos a las insinuaciones inequívocas. Por supuesto que no, la cuestión se trata de un coqueteo inocente. ¿Por qué no sonreírle en el supermercado a un chico guapo o no conversar de forma agradable mientras te encuentras en la fila? Las francesas se recuerdan a sí mismas que son interesantes y atractivas y no se niegan a mostrarlo, así despertando en su pareja un sentimiento de rivalidad.

6. Ellas se rodean de cosas bonitas

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Admítelo, ¿tienes un conjunto de lencería para “ocasiones especiales” o un conjunto de cosméticos que está esperando “el momento de la verdad” para ser utilizado? Así, la belleza francesa nunca lo permitirá. Todo lo que está guardado y espera su hora, tiene que ser utilizado ahora mismo, de lo contrario ese momento puede no llegar.

Ella sabe que la autoestima se forma primeramente de aquellas cosas que la rodean y en las cuales está vestida. La francesa crea su look cotidiano, evaluando la impresión que creará en las personas de alrededor con su aspecto físico y, por cierto, con esto podrá aumentar su autoestima, capturando las miradas de los hombres.

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5. Ellas ponen sus necesidades en primer lugar

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Posiblemente es una de las principales razones por las qué todas las bellas francesas tienen todo bien en su vida privada. Ellas saben que, si están contentas con su vida, entonces otras personas también se sentirán cómodas a su lado. Ningún sacrificio, los hijos y la familia no están en primer lugar. Principalmente, hay que satisfacer sus propias solicitudes y, entonces, no existirá la sensación de una persona cansada, que en realidad pierde el respeto de la pareja, ya que ¿a quién le interesa una persona que sacrifica su belleza, salud y tiempo, aunque sea por él?

Una francesa no se encerrará en casa, así privándose de la comunicación. El componente principal de su encanto consiste en que aquel hombre que ella eligió como compañero de vida, de todo modos, se de cuenta de que puede perderla en cualquier momento.

4. Ellas disfrutan de los momentos

El concepto de la frase francesa “joie de vivre” es el placer de vivir aquí y ahora. A veces, la felicidad se oculta en las pequeñeces que nosotros no notamos, viviendo en el miedo del futuro o de un recuerdo del pasado.

Las francesas saben capturar el momento, recibiendo placer de lo qué está pasando con ellas ahora. Ya sea tomar el té con una bonita vajilla o la sonrisa que causó su chiste a sus amigos. También crea “momentos agradables” como estos. Nada dura para siempre, pero puedes alegrarte de la vida ahora mismo. No esperes un acontecimiento especial, créalo tú misma.

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3. Ellas saben qué es la individualidad

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No es importante que tu aspecto físico esté lejos de lo perfecto, siempre se nota si te cuidas y esto atrae a los representantes del sexo opuesto. Todos saben que el original es mejor que la copia. Y las francesas lo entendieron desde hace mucho tiempo, ya que, al crear un lookinigualable, nosotras mismas nos mimamos y apreciamos nuestra individualidad; algo que solamente nosotras tenemos, ya sea una nariz larga o un hueco entre los dientes. Aquí no hay lugar para la belleza estándar impuesta por la opinión de la sociedad.

Las francesas saben cómo presentar de manera beneficiosa sus ventajas y ocultar sus defectos. Y vale la pena aprender a hacerlo; buscar tu estilo y trabajar con él. Así, la autoestima aumentará y las relaciones se harán más fuertes. Si estás satisfecha contigo misma, entonces esta relación también se proyecta en las personas de alrededor.

2. Ellas combaten el estrés en su “jardín secreto”

Todas las personas en algún momento tienen emociones negativas, ya sea una francesa, estadounidense o mexicana. Se distingue solo el método de salir de esta negatividad. La francesa no se enojará con las personas de su alrededor, buscará el consuelo en los postres o contarles a sus amigas sus desastres. Ella irá a su “jardín secreto”.

“El jardín secreto” es el lugar o acción, que recupera las fuerzas, da el descanso necesario o reinicio peculiar. Esto puede ser un libro interesante, un viaje al bosque en soledad o un masaje realizado por profesionales. No vale la pena contar a alguien sobre su “jardín secreto”, que él sea tu secreto. Después de tal recuperación, la belleza francesa se siente descansada y llena de fuerzas. Así que, si sientes que el estrés comienza a destruir tu bienestar, tu autoestima está bajando y el interés hacia la vida se perdió completamente, busca de manera urgente tu “jardín secreto”.

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1. El comienzo de la baja autoestima

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Estamos seguros de que todas las mujeres de cualquier nacionalidad saben un par de trucos que ayudarán a aumentar el nivel de autoestima y alcanzar el equilibrio interior. ¿Quieres compartir tus métodos con nosotros?