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10 Productos que falsifican a menudo


La falsificación de productos alimenticios es un negocio muy rentable. Solo en los Estados Unidos la facturación del comercio de productos falsificados supera los 650 mil millones de USD por año. Entonces, incluso la comida más familiar puede ser falsificada, y luego los envases pueden contener una sorpresa desagradable. Sin embargo, en la mayoría de los casos, no es difícil detectar la falsificación.

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1. Guisantes

Los guisantes verdes no siempre son lo que parecen, también se falsifican. Los guisantes falsos son una mezcla de soja, guisantes de nieve, colorantes y metabisulfito de sodio. Este último, por cierto, está prohibido en muchos países debido al alto riesgo de desarrollar cáncer y posibles trastornos metabólicos.

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¿Cómo evitar comprar una falsificación? Compra guisantes de productores conocidos que indiquen la región de origen del producto. El color demasiado llamativo y antinatural sugiere que durante la producción de los guisantes se agregó el colorante.

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2. Canela

Nuestra vida nunca volverá a ser la misma: lo que tomábamos por canela, de hecho era cassia. Cassia es un análogo barato de la famosa especia, se vende en todas partes bajo la apariencia de canela, tiene un olor diferente y, lo más importante, es peligrosa para la salud (los compuestos aromáticos contenidos en la cassia pueden causar migrañas). Para producción de la canela auténtica se utiliza la capa interior de corteza de árbol de hoja perenne, que crece solo en Sri Lanka y en el oeste de la India. La cassia se extrae de la corteza de los árboles que crecen en China, Vietnam e Indonesia.

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3. Arándanos

El centro de derechos del consumidor sin fines de lucro en los Estados Unidos realizó un estudio de los productos que contenían arándanos según la declaración de los productores y llegó a conclusiones decepcionantes. En la mayoría de los productos no había rastros de arándanos. La baya fue sustituida por una mezcla de almidón, aceite hidrogenado, colorantes y saborizantes. La gran cantidad de falsificaciones se explica por el hecho de que últimamente el arándano se considera un verdadero súper alimento y la demanda es mayor que nunca.

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¿Cómo evitar comprar una falsificación?

  • Lee la composición. La presencia en la lista de ingredientes del colorante indigotina (E132) indica que es muy probable que no hay arándano en el producto.

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4. Agua mineral

El agua mineral es un producto único, en el proceso de producción y posterior embotellado no está sujeto a ningún tratamiento y se embotella directamente de la fuente. Gracias a esto, se conservan sus propiedades curativas. Pero esta singularidad anima a los fabricantes deshonestos a falsificarlo. El agua mineral falsa es una mezcla de agua del grifo, yodo y sal. Su compra puede provocar problemas de salud debido a la falta de control de calidad. ¿Cómo evitar comprar una falsificación? En la botella ideal de agua mineral se indica la fuente de su origen, y se proporcionan las indicaciones precisas para su administración y aplicación (gastritis, enfermedades renales, etc.). Asegúrate de que la etiqueta esté bien pegada, la letra en la etiqueta se vea bien y que la tapa esté bien enroscada.

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5. Nata montada

Algunos fabricantes de nata montada son tan ingeniosos que prescinden de nata en la producción de este producto. En 1966, el químico estadounidense William Mitchell inventó un sustituto de la nata montada, que estaba compuesta por aceite de coco, jarabe de maíz, saborizante natural y espesantes. Sin embargo contiene leche, pero su contenido es muy bajo. Por supuesto, este tipo de nata montada tiene sus ventajas: no se corta, se ve genial y es fácil de manejar para un cocinero principiante. Pero los verdaderos expertos culinarios detectan la sustitución enseguida.

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¿Cómo evitar comprar una falsificación?

  • En la etiqueta de un contenedor a presión de nata montada, en la primera línea debe aparecer la palabra “nata”, no “grasas vegetales” o “azúcar”.
  • Los fabricantes de nata falsa a menudo recurren a la astucia, colocando una imagen de la nata en el envase, pero en la etiqueta del producto indican modestamente “producto lácteo”, “crema batida”. Presta atención a las palabras, aquí realmente importan.
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6. Vieiras

La vieira es un molusco bivalvo y un manjar terriblemente caro, pero muy pocas personas saben cómo se ve en realidad. Los gourmets están expuestos al fraude por parte de vendedores deshonestos que sustituyen las vieiras por pescado, carne de raya, caballito de mar e incluso con carne de tiburón. A veces en lugar de una vieira en los restaurantes sirven ensaladas con hongo blanco. ¿Cómo evitar comprar una falsificación? Una vieira 100% auténtica se sirve solo con la concha. Es imposible de sustituir o falsificarla. Las vieiras congeladas deben ser de color rosa claro o beige.

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7. Caviar

El caviar es un verdadero “campeón” de las falsificaciones. Los fabricantes deshonestos falsifican una amplia variedad de huevas de pescado, por ejemplo, las huevas de peces voladores (tobiko) se reemplaza con huevas de capelán, y las huevas de lucio pintadas a menudo se hacen pasar por el costoso caviar negro. Además, los expertos señalan que no es fácil distinguir los sabores del caviar falso y el caviar verdadero. La tercera parte del caviar vendido en Europa es falsificado. Entre todos los caviares se distingue el rojo, ya que se falsifica con mayor frecuencia. El caviar rojo falsificado es una mezcla de gelatina, caldo de pescado, aceite vegetal y colorante. En los escaparates de las tiendas se puede encontrar el sustituto de caviar rojo que está hecho de algas, sin embargo, su costo es tan bajo que es muy difícil confundirlo con el auténtico.

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¿Cómo evitar comprar una falsificación?

  • El caviar negro no es uniforme: todos los huevos son de diferentes tamaños.
  • Huevas de peces voladores, tobiko, son un poco más grandes que las huevas de capelán.
  • Si el caviar rojo se adhiere a los dientes, no se estalla en la boca y tiene un fuerte olor a pescado, por desgracia es falsificado.
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8. Pegamento para la carne

A la mayoría de los fabricantes no les gusta deshacerse de los productos residuales, ya que cuanto más residuos, más pérdidas. Por lo tanto, los químicos inventaron una cosa maravillosa llamada transglutaminasa; en otras palabras, pegamento para la carne. Con la ayuda del ingenio y la transglutaminasa, un centenar de restos de carne se convierten en una pieza bastante tierna o en un bistec. Sin embargo, el uso de transglutaminasa no es nada inofensivo. A pesar de que es un componente completamente orgánico (producido por el cuerpo humano y por los animales), el abuso puede provocar alergias, trastornos alimenticios y enfermedad celíaca: una enfermedad autoinmune que provoca una deficiencia en la absorción de grasas, vitaminas, hierro y calcio. ¿Cómo evitar comprar una falsificación? Adquirir productos de agricultores conocidos, abstenerse de usar productos precocinados y alimentos procesados. La carne pegada se puede distinguir fácilmente por las líneas poco naturales de unión de las piezas.

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9. Carne para hamburguesas

En el siglo XXI, las hamburguesas han dejado de ser solo carne molida, ahora las compañías más importantes están trabajando en la creación de sustitutos de la carne. Por lo tanto, en 2016, Impossible Foods presentó un sustituto de carne de res basado en levadura modificada genéticamente, trigo texturizado y almidón de papa. Es bastante difícil distinguir esta carne de la carne natural, y aún más difícil si es una hamburguesa ya hecha. Además, a menudo las hamburguesas están hechas de soja y otras legumbres de tal manera que a los consumidores parecen más ricos que los auténticos.

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¿Cómo evitar comprar una falsificación?

  • La respuesta es obvia: haz hamburguesas tú mismo y evita la comida rápida.

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10. Productos ahumados

El ahumado natural es un proceso largo y lento, por lo que los fabricantes utilizan cada vez más el “humo líquido”. Hay que notar que los productos ahumados no son beneficiosos para la salud (no es importante de qué manera se ahumó el producto) y tienes que intentar consumirlos no más a menudo que un par de veces al mes. Los investigadores todavía no han encontrado pruebas convincentes de las propiedades nocivas del “humo líquido”, pero los sustitutos defectuosos y la sobredosis de este producto durante el ahumado pueden provocar intoxicaciones. ¿Cómo evitar comprar una falsificación? La carne o pescado ahumado debe estar seco. El color de toda la superficie debe ser liso y suave, sin manchas oscuras ni imperfecciones.

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Bonus: 15 Tips para conservar frutas y verduras

A veces, cuando vas a comprar la despensa, te emocionas demasiado y echas al carrito un poco de todo porque “más vale que sobre y no que falte”. Las frutas y verduras siguen madurándose y, desafortunadamente, terminas tirando a la basura mucho de lo que compraste porque ya no está en buen estado para consumirse. La conservación que le das a la comida puede favorecer tu economía y evitar que se deseche porque se echó a perder. Es importante que tomes en cuenta el clima del lugar donde vives, porque esto también puede afectar la maduración de los alimentos. Entre más húmedo y caluroso sea un lugar, más riesgo corren algunos vegetales.

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Fuera del refrigerador

1. Envuelve los tallos de los plátanos con plástico o aluminio

Los plátanos producen gas etileno dentro del periodo de maduración. Al cubrir los tallos con plástico o aluminio, se puede impedir que se expanda a otras partes de la fruta, evitando que la pulpa se ablande demasiado rápido.

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  • Su duración habitual se alargará de 4 a 5 días.

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2. Coloca las cebollas en medias de nylon, retorciendo entre cada una para que quede una separación

El exceso de humedad podría hacer que las cebollas estén podridas en poco tiempo. Lo ideal es mantenerlas en un lugar fresco y con poca luz. Puedes meterlas en medias de nailon o en mallas que tengan agujeros y colgarlas para conservarlas mejor. Su duración puede alargarse de 6 a 8 meses.

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3. Al ajo le gusta la oscuridad y los lugares con poca humedad

Si acostumbras meter el ajo en el refrigerador, sería mejor que lo consideres, pues aunque puede durar, es más probable que se pudra por la humedad. Lo ideal es conservarlo en un recipiente o una bolsa de papel que se encuentre en un lugar oscuro y seco.

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  • Si mantienes las cabezas de ajo intactas pueden durar hasta 2 meses; si separas los dientes, su duración se acorta de 3 a 10 días.
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4. Perejil, cilantro, albahaca y espárragos: coloca los tallos en un recipiente con agua y déjalos a temperatura ambiente (sin lavarlos)

Si no los quieres meter al refrigerador, es importante que los mantengas en agua, tal como si fueran flores. Así podrás ir cortando las hojas que requieras para consumirlas. En buen estado, pueden durar de 4 a 5 días.

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5. Las papas van en mallas o sueltas y en un lugar fresco

Evita colocarlas en bolsas de plástico. Es mejor ponerlas dentro de mallas o bolsas oscuras que tengan algunas perforaciones que favorezcan su transpiración. Si lo deseas, otra opción para conservarlas puede ser una caja con rejillas que esté cubierta en el fondo con periódico o papel absorbente. La temperatura ideal que deben tener las papas va de los 7 a los 11 grados.

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  • Duración de 1 a 2 semanas.

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6. Si los aguacates no están maduros, cúbrelos con periódico y mételos en una bolsa de papel

Si los aguacates están verdes y los metes al refrigerador, frenarás su proceso de maduración. Para que siga madurando, debes envolverlo con periódico y colocarlo dentro de una bolsa de papel. Posteriormente, puedes ponerlo en el mueble donde tienes el resto de tu despensa. Si deseas que madure más rápido, coloca dentro de la bolsa un plátano también. Con bolsa: maduración de 3 a 5 días.

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7. Los tomates deben estar en una temperatura mayor a los 10 grados para conservar mejor sus sabores

En el caso de los tomates, entre más maduros estén, más concentrados son sus sabores. Cuando entran en contacto con el congelador, y permanecen en esa temperatura, llegan a perder su sabor. Lo ideal es conservarlos a una temperatura superior a los 10 grados.

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  • Su duración puede variar, de 3 semanas hasta 2 meses, dependiendo del grado de maduración en el que se encuentran cuando se compran.

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Dentro del refrigerador

1. Mete los champiñones y las setas (sin lavarlos) en una bolsa de papel con perejil

Es importante que no laves los hongos si no los vas a consumir en ese momento. Al ponerlos en contacto con agua, podemos generar humedad porque no se secan por completo. Se recomienda guardarlos en una bolsa de papel y añadir unas ramas de perejil para que funcione como antioxidante y no aparezcan manchas. Posteriormente, debes meterlos al refrigerador. Duración de 3 a 5 días.

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2. Desinfecta tus fresas con vinagre blanco sin quitarles el tallo

Lo ideal es lavar las fresas hasta que se van a consumir, de lo contrario podrían absorber agua y comenzarían a ablandarse, acelerando su proceso de maduración. Para desinfectarlas puedes usar 1,3 de vinagre blanco y 2,3 de agua. Es importante que verifiques que no haya ninguna fresa con moho porque podría arruinar al resto. Solo si vas a congelarlas, retírales el tallo y colócalas en una bolsa hermética. Si se quedarán en la parte de abajo, ponlas en un colador para que respiren.

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  • En el refrigerador: pueden durar de 5 a 6 días.
  • En el congelador: de 2 a 4 meses.
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3. Envuelve la lechuga, espinaca o acelga (después de desinfectar) para mantenerlas frescas

Lava y desinfecta. Asegúrate de que las hojas estén completamente secas antes de guardar en el refrigerador. Puedes hacerlo en un recipiente de plástico o en una bolsa hermética. Es importante que las envuelvas bien con papel absorbente porque esto hará que los restos de agua que pudieron quedar en el proceso de lavado, se eliminen en su totalidad. Si las guardas de manera correcta, durarán de 1 a 2 semanas en buen estado.

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4. Si ya cortaste un limón, no dejes que la otra mitad se desperdicie. Envuelve en aluminio o ponle sal

A veces usamos solo una mitad del limón y terminamos por tirarlo en la basura. Lo mejor es que lo envuelvas en aluminio. Otra alternativa es poner sal en la pulpa y guardar en el refrigerador. Antes de usarlo, solo tienes que enjuagarlo bien.

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  • Enteros: hasta 2 semanas.
  • Partidos: hasta 3 días sin cambiar su color y sabor.

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5. No dejes que el aguacate se oxide después de partirlo

Para que no pierda su color verde y se ponga negro, ponle unas gotas de limón hasta que toda la pulpa se cubra o coloca un poco de aceite comestible. Otra alternativa es cortar algunos trozos de cebolla y acomodarlos en un recipiente para poner el aguacate encima. Conservará su color de 1 a 2 días.

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6. Si pelaste papas de más, ponlas en un recipiente con agua y vinagre blanco

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No calculaste muy bien o te sobró alguna papa en la comida. Como ya está pelada, si la metes sola en el refrigerador, al día siguiente la encontrarás más oscura. Para conservarla, ponla en un recipiente y cúbrela de agua. Agrega unas gotas de vinagre blanco y resérvalas en el refrigerador. Duración: de 3 a 4 días.

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7. Si tus plátanos ya están muy maduros, puedes meterlos al congelador para consumirlos en licuados

A veces, cuando nos damos cuenta, los plátanos ya están muy maduros y son tantos que no podemos consumirlos todos en ese momento. Para conservarlos en buen estado, quítales la cáscara, pártelos a la mitad y mételos en una bolsa hermética. Colócalos en el congelador. Podrán durarte de 2 a 3 meses.

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8. Arma cubitos llenos de sabor con cilantro, perejil, albahaca o cualquier otra hierba o planta comestible

Si te gustan las cosas prácticas, puedes tener en el congelador cubos llenos de sabores y aromas listos para cuando cocines. Pica finamente las hierbas o plantas que quieres usar y ponlas al fondo en cada uno de los espacios de la charola para hielos. Agrega mantequilla derretida o aceite. Si lo haces con la primera, deja enfriar y congela.

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  • Duración: de 2 semanas a 1 mes.

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