Esta baya de enredadera es muy distinta de los demás frutos por su forma y su textura. Podemos disfrutarla en ensaladas, batidos, helados y una gran variedad de postres. El kiwi proviene de China, y se hizo popular desde su introducción a Nueva Zelanda, convirtiéndose en una de las frutas exóticas más populares del mundo.
1. Refuerza tus defensas
Uno de los grandes beneficios de consumir kiwi se ve reflejado en tu sistema inmune, gracias a su alto contenido de vitaminas y minerales. Esto mantiene a tus defensas activas y preparadas para defender a tu cuerpo de cualquier elemento extraño que pudiera dañar tu salud. Según un estudio de la Universidad de Cambridge, esta fruta aporta nutrientes que contribuyen a la reparación de nuestro ADN.
2. Combate la hipertensión
La salud de tu corazón y el resto de tu sistema circulatorio también podría mejorar gracias a los antioxidantes que aporta esta deliciosa fruta. Un estudio publicado en el Diario de la Hipertensión Humana demostró que el consumo de este producto ocasiona mejoras considerables en la presión arterial causada por el tabaquismo. En el experimento se les suministró a hombres con este hábito una ración de tres kiwis al día. Estos presentaron mejoras en su presión sanguínea, ya que la fruta reduce el nivel de triglicéridos en la sangre.
3. Ayuda contra el estreñimiento
Comer kiwi en su forma natural por las mañanas o por las tardes puede ayudar a tu tránsito intestinal gracias a su alto contenido de fibra, facilitando la digestión y eliminando la sensación de pesadez en el área abdominal. En la Universidad de Massey se realizó una investigación acerca de los beneficios que el kiwi tiene en nuestro sistema digestivo, entre los cuales se encuentra el alivio al estreñimiento.
4. Evita la retención de líquidos
Gracias a su alto contenido de minerales, el kiwi puede ser un gran aliado cuando se trata de perder algunos kilos de más. Gracias a esta propiedad, un estudio de la Universidad de Agricultura en Bihar reveló que podemos recuperar los minerales perdidos durante el ejercicio consumiendo este alimento. También ayuda a evitar la retención de líquidos, lo cual, en gran parte, es responsable del aumento de peso.
5. Previene la aparición de arrugas
El kiwi tiene mucho más que vitaminas y fibra, ya que cuenta con polisacáridos, los cuales ayudan a la regeneración y proliferación celular. Además, posee colágeno, el cual resulta excelente para la salud y para la elasticidad de la piel, ya que repercute en la prevención de las arrugas por envejecimiento. Esta fruta también posee propiedades antioxidantes.
6. Cuida tus ojos de los rayos UV
Muchas veces tendemos a reducir el cuidado de nuestra vista al uso de lentes para ver mejor, sin saber que podemos lograr esto desde nuestra dieta. El kiwi es rico en fitoquímicos como la luteína. Este componente se encarga de proteger las membranas de los rayos ultravioleta, evitando las presbicia y el deterioro de la vista por la exposición constante a luces nocivas.
7. Mejora la salud de tus huesos
Uno de los compuestos con mayor presencia en el kiwi es la vitamina C, la cual es excelente para la prevención de distintas enfermedades, como padecimientos en la estructura ósea, manteniendo fuerte el tejido de los huesos a través del tiempo, evitando lesiones y acelerando su recuperación en caso de que ya existan daños. Expertos del Instituto de Salud y Nutrición Toyama realizaron una publicación donde se puede constatar los efectos del kiwi en la densidad ósea gracias también a su contenido de magnesio y vitamina K.
8. Reduce el estrés
Los efectos antioxidantes del kiwi también repercuten en el estrés. El consumo de una o dos piezas de este fruto al día pueden aumentar tu buen humor, como se indicó en un estudio realizado en hombres adultos a los que se les dio una dieta rica en antioxidantes y vitamina C. Estos se encontraban bajo situaciones de estrés, y mostraron mejoras considerables en su conducta. El estudio fue realizado en Nueva Zelanda, y estuvo a cargo de la Universidad de Otago.
9. Ayuda a evitar la anemia
Junto con una dieta rica en hierro, el kiwi puede ser una pieza clave en el tratamiento de la anemia. El hacerlo parte de tu desayuno puede traer grandes cambios a tus niveles de hierro en la sangre, hasta llevarlos a una cantidad que resulte saludable para tu cuerpo. En una intervención de 16 semanas realizada por expertas de la Universidad de Massey a un grupo de mujeres, se comprobó que el kiwi ayuda a estabilizar los índices de hierro.
10. Cuida tu cabello
El consumo frecuente de esta fruta también tiene otras propiedades que ayudan al crecimiento de nuestro cabello. Esto se debe a que el kiwi es rico en vitamina E, la cual ayuda a regenerar los tejidos capilares, incluyendo el pelo y las uñas. Así que, si deseas mantener una cabellera abundante y brillante, te recomendamos añadir este alimento a tu dieta. ¿Cuál es tu forma favorita de comer kiwi? ¿Conoces otra forma de obtener un cabello hermoso y unos ojos saludables? Cuéntanos en la sección de comentarios.
Bonus: Las peculiaridades de estas 9 frutas nos hacen preguntarnos si son de este planeta
Existen cientos de motivos para tomar un avión y emprender un viaje hacia tierras desconocidas: las distintas ciudades, sus playas, platillos típicos, costumbres, museos y todo lo que hace único a cada país. Pero ¿alguna vez pensaste en visitar un lugar por las plantas que puedes encontrar allí? Las frutas y verduras propias de una región son la base de la gastronomía de cada lugar, y aventurarte a descubrirlas puede convertirse en una nueva forma de conocer el mundo.
1. Durián
Este fruto proviene de un árbol de más de 25 metros de altura. Es de gran tamaño, casi como una sandía, y, aunque es conocido por ser el más apestoso del mundo debido a su penetrante olor parecido al de la cebolla podrida, igualmente lo es por su delicioso sabor y los beneficios de su consumo en la salud. Es importante aclarar que no está permitido llevar esta fruta en el transporte público ni dejarla en algunos hoteles debido a su aroma.
2. Rambután
Aunque actualmente se lo puede encontrar en distintos países de América Latina, el rambután es originario del sudeste asiático. Esta fruta tiene un sabor fresco y dulce, y crece en racimos de diez. Posee una piel roja y áspera que debe ser retirada para poder consumir la pulpa, la cual puede comerse cruda o como acompañante en ensaladas. Para su exportación, el rambután debe contar con un índice específico de dulzura, el cual es medido en grados Brix.
3. Pitahaya
También conocido como “fruta del dragón” por la textura de su piel, este alimento proviene de la familia de las cactáceas. Su pulpa suave y jugosa puede ser amarilla, roja o blanca. Al madurar, su cáscara cambia de verde a un tono magenta o amarillo, siendo el fruto más rojo el que tiene un sabor menos dulce. También cuenta con una piel escamosa con espinas que, aunque son fáciles de retirar, pueden lastimarnos al cosecharlas.
4. Camu-camu
Esta fruta crece en arbustos a lo largo del Amazonas durante la época de lluvias. Es considerada un superalimento por su alto contenido de vitaminas, y se puede consumir en batidos, jugos, vinagretas y helados. Es una fruta pequeña de color rojizo, cuyo sabor es ligeramente ácido.
5. Lichi
Su cáscara de color rosa o rojo intenso parece un poco rugosa y áspera, pero no es difícil retirarla, ya que es muy flexible. En el interior tiene una pulpa blanca casi gelatinosa y transparente con un aroma dulce muy particular, lo que la hace un ingrediente recurrente en la elaboración de perfumes. En su corazón tiene una semilla parecida a la del mamey, pero mucho más pequeña. Esta fruta se consume cruda.
6. Baya de goji
En el continente asiático, estas peculiares bayas tienen un papel muy importante dentro de la gastronomía. Se consumen crudas, deshidratadas o en polvo como suplemento alimenticio. También se las conoce como “bayas del Himalaya”, aunque, en realidad, existen algunas discusiones acerca de si es posible que crezcan en esa zona en específico. Se presume que hay más de 40 variedades de este fruto.
7. Mangostán
Se dice que la reina Victoria ofrecía una retribución a aquellas personas que pudieran conseguirle la entonces denominada “reina de las frutas”, y es considerada una de las más deliciosas del continente asiático. Posee una corteza bastante gruesa que debe retirarse para comer la pulpa blanca de su interior, cuya consistencia es suave, lo que permite que pueda ser consumida por niños y adultos.
8. Asaí
El asaí crece en suelos con altos niveles de humedad. Se trata de una baya que forma parte importante de la dieta amazónica. Fuera de su lugar de origen, este fruto es consumido deshidratado, ya que después de dejar el árbol se debe consumir en las siguientes 24 horas. Su consistencia es similar a la del chocolate. En Brasil existe un mercado que se caracteriza por la venta del asaí llamado Feira, y tiene más de 70 vendedores que comercializan más de 20 000 kg de esta fruta al día.
9. Kiwano
Esta fruta forma parte de la misma familia que el melón y el pepino, y tiene una pulpa gelatinosa de color verde que se encuentra cubierta por una cáscara de un tono entre amarillo y naranja con espinas. Su sabor es parecido al del kiwi debido a su textura, y al plátano por su aroma. En Nueva Zelanda se le conoce como “melón africano”, y este es el país que más lo produce en el mundo.
¿Cuál de estas frutas te pareció más extraña? ¿Te imaginas dar la vuelta al mundo para conocer la vegetación de cada país? Comparte tus pensamientos con nosotros en los comentarios.